Uno de los puntos de mayor importancia para e cuidado de las personas de la tercera edad es su alimentación, ya que cada persona es distinta y requiere de diferentes dietas por su edad, sus necesidades y más que nada su estado de salud.
Generalmente, quienes tienen hábitos alimentarios más inadecuados son las personas de la tercera edad, ya que, la alimentación de hoy en día no es la misma a la que ellos adquirieron en su época de vida donde su demanda de energía era mayor, sin embrago, cuando las persona crecen y llega a la tercera edad tanto su metabolismo como otros aspectos físicos y mentales cambian, estos se vuelven más lentos, provocando así, que deban comer con mayor moderación, evitando a toda costa la obesidad y evitar enfermedades asociadas a esta.
Sin embargo, hay que tener muy en cuenta que el termino “comer menos” no significa no alimentarse. El adulto mayor necesita una dieta que incluya: proteínas, vitaminas y minerales, dependiendo de la persona, lo único que se debe reducir es la ingesta de hidratos de carbono y en particular la de grasas, dulces y toda clase de frituras.
Al aplicar esto se evitará la acumulación de grasas en el organismo y principalmente, la degeneración de las arterias, reduciendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Dentro de lo que debemos incluir en una dieta completa para personas mayores, se encuentran los antioxidantes. Al llegar a cierta edad, se dejan de generar células productoras de energía, contribuyendo al proceso de envejecimiento, gracias a los antioxidantes podemos reducir el efecto negativo de los radicales libres en las personas mayores. por eso, las dieta debe ser rica en vitaminas C y E, con mucha fruta y verduras, hortalizas de color verde y vegetales ricos en aceite.
También es conveniente contar con alimentos ricos en selenio, como el arroz o la avena, porque protegen al corazón y favorecen el sistema inmunitario, siendo eficaces contra la aparición de algunos tipos de cáncer, como el de colon, próstata o pulmón.
Sabemos que, gracias a una correcta alimentación, es posible mejorar la calidad de vida de una persona mayor.