La Importancia de la Hidratación en la Tercera Edad

junio 4, 2014

FOTOS ROCAMADOR, AGUA 006

 

La Importancia de la

Hidratación en la Tercera Edad

 

El cuerpo humano se compone de más de un 60% de agua. Según se va envejeciendo, el agua en el cuerpo disminuye y la sensación de sed va desapareciendo. En ocasiones, también, las personas mayores deciden no beber agua, para evitar incontinencias Esto puede provocar una deshidratación, con consecuencias negativas.

La simple deshidratación es una de las causas de caídas, estreñimiento, dolores de cabeza, deterioro cognitivo y de mortalidad. El déficit de consumo de líquidos también puede derivar en problemas de movilidad y de deglución.

Con el envejecimiento, los riñones tienen menor capacidad para concentrar la orina, y retener el agua necesario.

Muchos de los ingresos hospitalarios de personas mayores se producen por esta falta de líquido en el cuerpo.

 

ACTITUDES RECOMENDABLES

 

–         Establecer una rutina diaria, que se convierta en costumbre y, la persona mayor se habitúa a tomar líquido.

–         Justificar el por qué tomar líquido, informar sobre ello. No es un antojo, es una necesidad.  Sólo tomando la cantidad de agua necesaria se evitan muchos males.

–         Distribuir la ingesta de líquidos durante el día, mejor antes de las seis de la tarde. De esta manera reducimos la necesidad de ir al baño durante la noche.

–         Hacer que resulte apetecible, a la temperatura deseada, con el sabor que más gusta, etc.

–         Se aconseja entre 1 litro y 1,5 litros, diarios dependiendo de la época del año y del ambiente en el que nos encontramos.

–         Informar de que mejora su calidad de vida, y de que genera ningún inconveniente.

–         Si los familiares están informados, será más fácil evitarlo.

–         Acompañar, a la persona mayor, en dicha ingesta, que vea que es bueno para todos.

Comments are closed.